Todavía en la vida y en la muerte, todavía en el rayo y en la lluvia, todavía con la sangre y sin balas, todavía con lo mío y lo tuyo, todavía con el fuego en el agua, todavía con el calor del frío, todavía en la tierra divina y en el infierno de la palabra, todavía en la flor del cactus el colibrí se bebe el amanecer...
Escrito anónimo en la Plaza de Mina Clavero, Córdoba, República Argentina.
sábado, 17 de abril de 2010
el olor de los días muertos con sus lluvias y pesares
3 comentarios:
que conmovedora tus poesias, algunas,(lo que yo puedo entender), me encatanan.Julie pera
Leí bastantes, me gusta el valor puesto en cada palabra, no en frases.
es un espejo
decir callar
Muy bueno!
Sí, es un espejo, decir, callar, la poesía es espejo. Refleja en ecos que son, finalmente, espejos.
gracias por leer.
Super Up!
Publicar un comentario