I
Las moscas buscan el postre
como yo el Silencio
no las sombras ni tu amor
sólo el silencio
II
Pequeñas ruinas que se abren
donde todo deseo duerme
entre mis manos una flor nace
III
Se empaña una imagen en mi corazón
un dulce verdor
cubre mi memoria cerrada
IV
Hijo del viento, esclavo apuñalado
corto la maleza que no deja ver
se abre paso un horizonte confuso
V
Suave melodía desde un pozo en el aire
dulce sueño en tu boca
dulce y real
VI
Llévame hasta tu piel
sin preguntas, sin esquivos
quiero verte mirar el otro lado
Atrévete
VII
Lo real se confunde con el epifánico susurro
del hijo del viento
áspera corteza al sol resiste
VIII
Busca. Busca sin parar aquello
que envenena tus sueños
para saber el precio de lo que callaste
Busca. Sin parar. Busca
IX
Mutila tus deseos, uno a uno
con crueldad y sin asombro
para que la muerte no te agarre desprevenido
X
¿Buscabas una revolución de amor?
encontraste unos ojos vacíos
¿Buscabas una Revelación?
entonces te viste en el espejo
XI
El eco de un silencio late en mi
obscenos tambores de música infinita
la herencia y la sangre
si, el eco de un silencio antiguo
silencio testigo. No ajeno
XII
De mi pequeña conciencia traidora
me río
de este ropaje cargado de amaneceres
me río
llanto ahoga mar descanso
me río
XIII
Amor desterrado busca su primer refugio
agua natal
a la luz de esta luz rezo una pequeña plegaria.
XIV
Privado de toda razón
un impulso arrastra viejas máscaras
No! No dejes que me cieguen
Los dueños de la noche
XV
Canta. Canta aunque estés distante
cristaliza la marea
oye el silbido lejano de la confusión
que tus miedos vuelen con el otro que no sos
Espejo falso.
1 comentario:
Leyendo a Pizarnik y escuchando el mágico sonido de sus palabras.-
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